lunes, 2 de septiembre de 2013

Mi historia de infidelidad


Os quiero contar mi historia tal y como yo la veo, puede ser que como dice mi mujer Rosana, yo sea muy cuadriculado y es una película que yo me monto. Ella por supuesto tiene otra versión y su amigo Iosu, tendrá también la suya.

Soy un tío normal nacido en Bilbao, de nombre José Ramón Ferro y al que no le importo dejar toda su vida atrás y venirse a Vitoria a vivir con una mujer de la que me enamore locamente y a la cual hoy todavía adoro y quiero como pienso que no se puede querer a nadie.

Esta mujer se llama Rosana Azabal y cuando empezamos ha tener relaciones, yo acababa de terminar con la pareja que tenía y ella todavía vivía con la que era su pareja, pero también tenía medio finiquitada su relación.

Durante años hemos sido o por lo menos yo, eternamente felices, nos hemos reído de todo y hemos disfrutado de la vida juntos. Nuestros ingresos siempre han sido buenos y no nos hemos privado de nada, tenemos un coche cada uno, ella tiene un piso en Vitoria y yo un adosado en Cuzcurrita para pasar los fines de semana, vacaciones, etc.

Con el paso de los años, decidimos tener hijos y la vida nos obsequió con dos preciosas niñas que nacieron en 2007 y a las cuales adoramos los dos sin ninguna duda. Durante los primeros tres o cuatro años de las niñas, lo hemos pasado muy mal por el trabajo que dan dos bebes. Yo siempre he tenido la sensación de tener a una mujer maravillosa a mi lado de la que poder aprender a ser padre, en la que podía confiar y apoyarme cuando lo necesitaba y por ello pienso que he podido resistir hasta hoy.

Con el paso de los años y cuando las niñas ya no necesitaban tanto nuestra atención, pudimos empezar a relajarnos un poco y la relación de pareja empezó a enfriarse. Por mi forma de ser, muy probablemente la gran mayoría del problema lo causase yo por intentar buscar una válvula de escape a esos años vividos de trabajo-niñas, niñas-trabajo y me centrase en mis aficiones y mi trabajo, cerrándome dentro de mí. Durante estos años en ocasiones me he sentido menospreciado por algunos comentarios de mi mujer sobre mi nivel cultural, forma física o manera de ver la vida, esto creo que facilitaba y acrecentaba más que yo me fuese cerrando dentro de mí mismo.

Durante este periodo, la relación familiar creo que funcionaba perfectamente pero la de pareja cada vez decae más y empiezo a ver como mi mujer se separa cada vez mas de mí. Estamos bajo el mismo techo, compartimos cosas, no discrepamos en la educación de nuestras hijas, etc. pero empiezo a notar que mi mujer hace una doble vida, entre semana se acuesta a altas horas de la noche enganchada al Spotbros, los fines de semana si no es el viernes es el sábado o sino los dos, duerme fuera de casa con la excusa de cursos de formación o reuniones de trabajo fuera de Vitoria y cada vez pasa menos tiempo con las niñas y conmigo. Empieza a pintar cuando nunca antes lo hacía y cuando le pregunto me dice que es por el trabajo, que ahora está en la ejecutiva de ELA y le han dado más responsabilidades.

En junio o julio de este año, hablamos Rosana y yo, me dice que nuestra relación no va, que soy un mal padre, que me sobran mis hijas y por supuesto una pésima pareja, que tiene que pensar muchas cosas y tiene muchas dudas.

De repente aparece en escena un tal Iosu, del que me entero de su existencia por qué las niñas me cuentan que han estado con un amigo de mama que su novia va a tener un bebe, que tiene un gato, etc. Días más tarde otra vez me cuentan las niñas que han visto a Iosu y han estado con él, que les hace trucos de magia y para colmo un día que por razones de trabajo yo no pude estar en casa, aparece Iosu a pasar el día con ellas e incluso se permite el lujo de pasear con mi bicicleta y mi familia por Cuzcurrita como si fuese lo más normal del mundo.

Un día que le pregunto quién es Iosu, me dice que es un amigo que va a tener un hijo y esta agobiado con la situación, que queda con él y nuestras hijas para que vea que es maravilloso tener hijos.

Viendo esta situación y ya con la mosca detrás de la oreja, el seis o siete de agosto aprovechando que Rosana se va a hacer deporte a primera hora de la mañana y deja su móvil encima de la mesilla, me decido a buscar información en su móvil sobre la situación y me encuentro con esto:



 
 



 
Sin desperdicio ¿verdad? cuando viene de nuevo a casa hablo con ella y le pregunto directamente si existe una tercera persona y ella me dice que no, le insisto de nuevo y le pregunto directamente que relación tiene con Iosu y ella me dice que simplemente es un amigo que lo esta pasando mal por la muerte de su madre y ella le esta apoyando.
A ultima hora de la mañana le miro de nuevo el móvil y me encuentro con esto:
 
Como comprenderéis, después de esto hablo otra vez con ella y le digo que he visto las fotos en su móvil, que se lo de Iosu y ella me dice que solo son cuatro besos y que no existe nada más que una amistad, que son imaginaciones mías y solo son amigos.
Llegados a este punto le digo que tenemos que empezar a tramitar la separación y ella me dice que esperemos a Septiembre para que sus padres no estén en Vitoria y por el bien de las niñas, que ya habrán empezado el colegio y así se les hará menos duro. Yo le accedo y le digo que intentare guardar el tipo y seguir con la pantomima pero que por favor cese por lo menos durante este tiempo su relación con Iosu y ella ni me contesta.
Durante este tiempo nos vamos de vacaciones a Salamanca donde su familia, no os podéis imaginar lo difícil que ha sido para mí. Cada noche después de acostarnos en habitaciones separadas por razón de infraestructura, ella seguía con el móvil hasta altas horas de la madrugada y al día siguiente como si nada. De vuelta en Cuzcurrita, seguimos haciendo la pantomima pero ella en cuanto puede se marcha de casa, no pasa tiempo con nosotros y por las noches erre que erre con el móvil.
El día 27, aprovechando que me deja las llaves de su coche para acercarle unas cosas, le miro en la guantera y descubro este CD:




 
Pues bien, cuando le digo de nuevo que no está siendo sincera conmigo y lo de Iosu no son cuatro besos y no es de los últimos meses, ella me dice que ya está bien de espiarla y que está muy ofendida, me insulta y me dice que ya ha hablado con un amigo ertzaina y que tenga cuidado con las fotos que me puedo meter en un problema y sigue defendiendo que Iosu y ella solo son amigos y no me ha sido infiel, que lo conoce desde noviembre y que lo único que ha hecho es ayudarle con la muerte de su madre. Este servicio de nuestra sanidad pública debe ser nuevo, yo desde luego no lo conocía, si se te muere la madre, te puedes liar con la enfermera.
Mira cariño, me duele el corazón de no haberte dado lo que necesitabas y es una cosa que no podre superar jamás, puede ser que yo sea muy cuadriculado como decía al principio, que sea mala pareja y que la relación se termine por mi comportamiento o actitud, pero por favor no me hagas creer que lo tuyo con Iosu no es una infidelidad en toda regla. De ser cierto que solo sois amigos era muy fácil enseñarme las conversaciones  que mantienes con él y demostrarme que las palabras cariño, te quiero y de mas, no significan nada.
No intentes arreglar lo inarregable y sinceramente creo que esto se os ha ido de las manos. Aplícate los consejos que tanto le has dado a tu hermana sobre Nando, los principios que dices tener sobre fidelidad, pareja y honradez, pero sobre todo no te engañes a ti misma, te lo pido por el bien de nuestras hijas ya que por el mío es demasiado tarde.
Solo te pedí una cosa cuando empezamos a salir, que por favor no me engañases nunca y que me fueses fiel y desde luego si querías hacerme daño has dado en el clavo.
Tengo tanto dolor acumulado que ya no puedo seguir con esto y no sabes lo que me ha costado tomar esta decisión, un lo siento, me equivoque, no sabes lo bien que me habría venido. Yo no puedo seguir viviendo sabiendo que tengo que mantener una relación de por vida contigo a causa de nuestras hijas y viendo que no eres sincera conmigo, que aun presentándote evidencias fulminantes de tu relación con Iosu lo sigues negando y aun con nuestro matrimonio roto, me sigues mintiendo cuando me dices que te vas a dormir y sigues enganchada al móvil hora tras hora. Espero que algún día seas capaz de explicarles a nuestras hijas y al hijo de Iosu y su madre vuestra actitud y comportamiento e inculcarles que eso está mal hecho. Yo también quiero que mis hijas luchen por su felicidad pero no a cualquier precio. Te doy gracias por todo lo que me has dado bueno y sobre todo por las dos hijas que tenemos.
La última vez que hablamos en serio me dijiste que lo que más te gustaba de tu trabajo es ayudar a la gente a morir y eso de verdad se te da bien, conmigo te ha salido redondo.
Un beso de todo corazón y cuida de las niñas.
 
Por favor distribuid este documento entre todos vuestros conocidos para que por lo menos la mujer, novia o pareja de este tal Iosu, sepa la verdad sobre la relación que tiene con el padre de su hijo, que pueda actuar en consecuencia lo antes posible y no tenga que pasar lo que yo he vivido.